martes, 11 de noviembre de 2014

Conflictos éticos frecuentes en Atención Primaria: Confidencialidad

El ámbito de trabajo de los profesionales de AP es reducido, y ademas como el propio nombre de la especialidad indica, somos los médicos de la familia. Y también del vecino, del primo, etc... Y no solo eso, sino que si además trabajamos en localidades de tamaño medio es muy posible que gran parte del personal sean vecinos de la propia localidad (celadores, administrativos, auxiliares, enfermería, médicos y también el personal de limpieza del centro).


En nuestras consultas vecinas hay compañeros pasando consulta ante pacientes que pueden ser conocidos del que esta dentro de la nuestra y oír la conversación que mantenemos, en las sala de reuniones del centro de salud se comentan casos clínicos o situaciones comprometidas de algunos pacientes y hay que tener en cuenta quien nos esta escuchando. Hay familiares que nos solicitan información sobre pacientes sin que estos esten presentes


Esa es la parte sencilla, que tan solo con ser precavidos y tener presentes esas relaciones y quien es el dueño de la información, son fáciles de evitar. Pero ¿que ocurre cuando nos encontramos ante un conflicto que enfrenta a dos de nuestros pacientes?. Vamos a poner un caso y espero reflexiones en vuestros comentarios que después recopilaremos y analizaremos para dar respuesta en la próxima entrada:


"Se trata de un paciente de 45 años, camionero de profesión que se dedica a realizar viajes de larga distancia, con periodos largos fuera de su domicilio. está casado con dos hijos Su mujer también es paciente nuestra y es quien acude habitualmente a la consulta para solicitar alguna analítica de control del marido y ver sus resultados, así como recetas puntuales ya que los horarios de el  son poco compatibles con nuestra consulta.


En esta ocasión acude solo a la consulta y nos refiere que mantiene ocasionalmente relaciones extra-matrimoniales en sus viajes y que recientemente ha descubierto que una de estas parejas, siempre diferentes aunque localizables ha dado positivo en la prueba del VIH, por lo que nos solicita la realización de la prueba.


En su caso el resultado es positivo y se le plantea que seria necesario realizar un cribado de todos sus contactos sexuales, comenzando por su mujer, además de la utilización de medios de protección y los controles que precise la infección en su caso.


El paciente acepta informar a los contactos extra-maritales, pero no así a su mujer, comentando además que tampoco utilizará preservativo en sus relaciones ya que nunca lo ha usado y eso despertaría sospechas. 

Ante esta respuesta se le plantea que su mujer tambien es nuestra paciente y que si no es el quien informa a lo mejor nos vemos obligados a informarla nosotros y el nos responde amenazandonos con una denuncia por vulneración de la confidencialidad"

Se plantean varias preguntas ante este caso que podríamos resumir en dos:

  • ¿La confidencialidad es absoluta o hay supuestos en los que estamos obligados o podemos vulnerarla?

  • ¿Cual debe ser nuestra actitud con este paciente?